Sinaloa
En este reportaje documental sobre Sinaloa, busco arrojar luz sobre la realidad cruda y compleja que surgió a raíz de la detención del Chapo Guzmán y las consecuencias del narcotráfico en la vida cotidiana.
En esta serie muestro la dualidad existente en Sinaloa: la sombra de la inseguridad y la valentía palpable de la gente que sigue adelante a pesar de las dificultades. Las imágenes reflejan la lucha diaria de la comunidad, pero también la resiliencia que late en el corazón de quienes buscan construir un futuro mejor.
Mi enfoque documental no solo pretende exponer los desafíos, sino también resaltar la humanidad que persiste en medio del caos. Cada fotografía es un testimonio visual de la fortaleza de las personas y la esperanza que se aferra incluso en los momentos más oscuros.
Este reportaje es más que una serie de imágenes; es un llamado a la empatía y la comprensión, invitando a los espectadores a adentrarse en la complejidad de la realidad sinaloense y a reconocer la dignidad de aquellos que siguen adelante, resistiendo a pesar de las circunstancias.
Culiacán, capital del Estado de Sinaloa.
El mes de enero de 2017 se registraron 87 asesinatos en Sinaloa. Pese a ello, la gente intentaba hacer su vida normal.
La cotidianeidad se mezcla con los dispositivos policiales , las armas y la tensión permanente.
Capilla de Jesús Malverde, el llamado "Patrón" de los narcos.
Busto de Jesús Malverde.
La vida, pese a las circunstancias, no se paraliza.
Los despliegues del ejército ya no sorprenden ni a los más pequeños, que son testigos de la delincuencia que ejercen los narcos.
Huellas de los enfrentamientos en Culiacán. Los narcos utilizan armamento de guerra en muchas de sus acciones.
Los carteles de recompensas por los "chupados" (secuestrados) se mezclan con los de las tiendas en las carreteras de Culiacán.
Zulo en el que se refugió el Chapo Guzman hasta su huída y detención posterior.
El sinaloense en cordial, trabajador y quiere una vida sin narcos.
El índice de asesinatos ha disminuido considerablemente en los últimos años. La esperanza en las nuevas generaciones mantiene viva la posibilidad de un futuro más pacífico.